Todo humano, al nacer, es un aprendiz del existir. Y existe la posibilidad de que un día se dé cuenta de su libertad extraña y de su total responsabilidad. Entre ese nacer y esta posibilidad adulta, está el viaje conciencial del ser. Muchos bajan en la primera parada. Algunos no salen de la estación. Los pocos viajan toda su vida.
El Tractat de la Ignorància de JMa Uyà es una crónica detallada del particular viaje conciencial de un poeta-pensador que, a lo largo de los años de existencia que le fueron concedidos, se da cuenta de que el relato oficial de los profesores, de los manuales, de la crítica no encajan con lo que ve y oye. Un viaje que acaba con la evidencia de que junto a esta palabra “ignorancia” -negación de tantas cosas que se pretendían saber y pasaban por ser saber- debía de haber algo positivo, limpio, que abría una puerta que no habíamos visto, una puerta que nunca pensábamos en ella.