Henar Galán nos conduce, a través del laberinto de la mente perturbada de un poeta extraordinario: Leopoldo Maria Panero, al centro de la Feria del libro de Guayaquil, Ecuador.
Celebrada en un contexto político complejo y cambiante, Panero, al que temen y adoran por igual, es el Rey. Realismo mágico en estado puro.
Era el mes de octubre de 2010 cuando la autora, psicóloga de profesión y poeta de vocación, se embarca desde el manicomio del Dr. Rafael Inglott en Las Palmas, en la titánica misión de acompañar como cuidadora, secretaria, curadora y fedataria de un hombre desmesurado, con un universo propio al que las convenciones sociales no l'afecten per res, a un homenaje internacional a su persona y su obra.